Un fin de semana atípico se vivió en el Parque Sarmiento. Argentina volvía a disputar la Copa Davis con la Ensaladera de Plata en su poder por ser el campeón de la edición 2016. El rival era el mismo de cuartos de final de la temporada pasada, pero de local. Italia, con el equipo completo, llegó a Buenos Aires: Fognini, Seppi, Lorenzi y Bolelli, los mismos nombres de los últimos años. Del lado argentino las ausencias estuvieron a la orden del día. Sin Del Potro, Delbonis, Zeballos y con Schwartzman en el equipo, lesionado, el equipo capitaneado por Orsanic afrontó la serie diezmado pero a vender cara su derrota. Berlocq, Mayer y Pella completaban el conjunto albiceleste.
El jueves en el sorteo ya se supo que Fognini no disputaría el singles el viernes por una gastroenteritis mal curada, para cuidar su físico para el resto del fin de semana. Lorenzi y Seppi fueron los elegidos por Barazutti, capitán histórico italiano. Argentina tampoco contó con Schwartzman (lesión) ni Mayer (padre primerizo) para el viernes y los singlistas fueron Berlocq, convocado a último momento, y Pella, sin pretemporada y agotado mentalmente tras el título de Copa Davis, que acudió a esta serie por pedido exclusivo del capitán a pesar de haberle comunicado que no estaba al cien por cien para afrontar este compromiso.
Primer punto de la eliminatoria, Guido Pella no opuso resistencia ante Paolo Lorenzi. Error tras error, el argentino nunca pudo meterse en el partido y el italiano lo aprovechó. Contrariado con su tenis, Pella dejó una mala imagen ente un jugador en los papeles de menor jerarquía. El segundo punto lo disputaron Carlos Berlocq y Andreas Seppi. Charly no está en su mejor momento pero siempre en Copa Davis da un plus. Batalló y forzó al italiano hasta el tiebreak del cuarto set, pero ahí se quedó. 2-0 el viernes para Italia, el peor panorama para los locales de cara a un sábado con más dudas que certezas por el nivel y por la conformación de la pareja.
Finalmente Daniel Orsanic se decidió por Leonardo Mayer junto a Carlos Berlocq. Y la pareja respondió. En un vibrante partido vencieron a Simone Bolelli y Fabio Fognini en cinco sets, incluso levantaron un match point en el cuarto set. La remontada era posible. Los italianos como doblistas habían sido Top8 ATP y campeones del Australian Open en 2015 por lo que la victoria resonó en el ambiente tenístico. El público hizo todo lo posible dentro de la legal (y quizás más también) para alentar a su selección. El ambiente en el calor de Buenos Aires fue importante a la hora de inclinar la balanza en un partido tan parejo en lo tenístico.
Llegó el domingo. La ilusión del último campeón por revertir un 0-2 por primera vez en la historia argentina estaba intacta. Difícil por donde se la viera. Berlocq pasó de estar afuera del equipo a ser el estandarte, el salvavidas de la serie. Como es habitual, "Charly" entregó todo y más para derrotar a Lorenzi en un partido con más actitud que tenis. Interrupciones varias por el mal clima agregaron suspenso a la definición que se estiró hasta el quinto punto el lunes, por falta de luz. La épica aun era posible y "Hulk" Berlocq le permitió soñar a un país y pensar en los cuartos de final y no en el repechaje de septiembre.
Era el turno de Pella, de revertir la actuación del viernes, de consagrarse como jugador copero y de darle el pase a la siguiente ronda al equipo argentino. Dos sets a cero casi sin errores ante un Fognini plagado de errores no forzados, rabietas y sin aparentes ganas de correr en la cancha, encaminaban la victoria albiceleste. Pero el partido recién había empezado para el talento de San Remo. Fabio se activó, empezó a mover las piernas y dejó de fallar pelotas absurdas. Dotado de un tenis brillante, con la soga al cuello se acordó de jugar y dio vuelta un partido casi perdido. Casi, porque a partir del tercer set todo fue del visitante, que hasta se dio el lujo de discutir con el público.
El bahiense se retiró del estadio ovacionado y con lágrimas en los ojos. Más tranquilo pero con la misma bronca y decepción, en conferencia de prensa dijo: "Jugué bien pero él estuvo muy lúcido. En todos los años que llevo jugando he visto muy pocas veces los tiros que ha hecho Fognini en momentos en los que nadie se atrevería. Intenté desbordarlo en todo momento, tuve oportunidades pero no las pude concretar. Me duele en el alma no haber podido ganar pero así es el deporte". La jerarquía del italiano bastó para llevarse el partido decisivo y meter a Italia en cuartos de final, instancia en la que enfrentará a Bélgica.
Sin la contundencia de Mar del Plata 2014 pero con el mismo resultado final, Italia venció nuevamente a Argentina como visitante en una primera ronda de Copa Davis y lo mandó al repechaje, al último campeón, que vendió cara su derrotado llevando la serie hasta el quinto set del quinto punto. Pella no ganó pero dejó otra imagen, dejó todo como suele decirse en Argentina y eso el público lo valora. Los espectadores despidieron ovacionado al equipo argentino del Parque Roca mostrando memoria por lo obtenido en 2016 y por la entrega física y emocional de los jugadores durante el fin de de semana. Septiembre, Argentina te espera.
Daniel Vitale Pizarro