Canadá en su máxima expresión tenística
El impacto lo dio hace exactamente un año. En Montreal, el país que lo alberga desde muy joven, alcanzó la final del Masters 1000 de Canadá. Nadal fue demasiado para él. Luego "Rafa" encadenó Cincinnati y US Open, quizá su gesta más importante. Aquel día, tras la final perdida, tocó el Top10, aunque solo duró una semana dentro de los diez mejores, puesto que recuperó cinco meses más tarde y que ahora lo tiene no solo dentro, sino como protagonista y ostentando su mejor ranking histórico (6°). Doce meses después, Milos Raonic es campeón del ATP 500 de Washington, en una final histórica para su país.
Preclasificado número dos en Washington, Raonic sorteó a sus rivales sin perder sets, aunque con varios tiebreaks (cinco TB sobre diez sets disputados). La prematura caída de Berdych (preclasificado N°1) dejó acéfalo al cuadro principal y el rival de Milos fue otro canadiense, Vasek Pospisil. Un año mayor que Raonic (24 años), su rival fue su compañero de Copa Davis y lo derrotó como en la semifinal de Montreal 2013 para ingresar al Top10. Esta vez significó volver al Top6 y fue la primera final 100% canadiense en la historia de la ATP. El título quedó para el gigante de 196 centímetros de altura, trofeo que significó su primero de la serie 500.
No es solo un saque potente
Pospisil, que no se queda atrás en temas de altura (193cm), subió nueve puestos (27°) para quedar a dos lugares de su mejor ubicación. Para Vasek fue su primera final ATP. Además, esta temporada fue campeón en Atlanta y Wimbledon en dobles, junto a Jack Sock. Con la confianza en alto, fue el encargado de doblegar a Berdych (5°) en octavos de final y a Gasquet (14°) en semifinales. Aun con más partidos perdidos que ganados a nivel ATP (41-53), apunta, por ahora, a mantenerse estable en el Top30. Junto a la final en Washington, en 2014 acumula una semifinal en Chennai y cuatro cuartos de final (o mejor) en sus últimos cinco certámenes disputados.
Raonic, desbordado de confianza, expresó sus sensaciones tras la coronación en la capital norteamericana: "No podría haber pedido una mejor manera de llegar a la parte más importante del año. Creo que estoy jugando a un nivel alto. Creo que el número al lado de mi nombre no es casualidad y no creo que sea una casualidad si sigue bajando. Se trata de mejorar cada semana y encontrar una manera de ganar partidos".
Las banderas canadienses, omnipresentes en el estadio
A pesar de representar a Canadá, Milos Raonic nació el 27 de diciembre de 1990 en Podgorica, Montenegro. A los tres años de edad se mudó con su familia (ambos padres ingenieros) a Canadá y recién comenzó a jugar al tenis a los ocho años. Admirador de Pete Sampras, llegó a decir que había grabado todos sus partidos televisados. En 2010 debutó en Copa Davis ante Colombia (perdió ante Giraldo y Cabal los singles pero ganó el dobles junto a Nestor) y en 2011 fue distinguido como el jugador revelación ATP, luego de ascender del puesto 156° al 31° durante esa temporada.
El 2012 fue el año de su estabilización en el ranking y los resultados empezaron a llegar. Dos títulos, dos finales y su primera segunda semana en un Grand Slam (US Open). La temporada siguiente significó su consolidación como protagonista en cada torneo al que iba. Cuatro finales más alcanzadas (2-2), final de un Masters 1000 (Montreal) y segunda semana en Australian Open y US Open. También formó parte del Top10 durante una semana y alcanzó la semifinal de la Copa Davis, instancia a la que Canadá había llegado solo una vez en su historia, en ¡1913! Milos Raonic ya era el mejor jugador que había jugado al tenis representando al país más al norte de América.
Ljubicic y Piatti, los entrenadores de Raonic, observándolo en Roland Garros.
Cuartofinalista en Indian Wells, Miami, Monte Carlo y Roland Garros, y semifinalista en Roma y Wimbledon 2014, permitieron que Raonic volviera al Top10, principalmente por sus destacadas actuaciones en ambos Grand Slams. Escaló posiciones dentro del selecto grupo y se estableció como probable Top8 y participante del Masters en Londres, salvo que alguna lesión le impida competir durante la parte final de la temporada. A todo eso, le sumó el trofeo de Washington, su primer ATP 500 y la primera corona del 2014. Acumula seis títulos como profesional en once finales disputadas.
Convencido de que tenía muchas cosas por mejorar, Milos Raonic decidió darle un salto de calidad a su juego y a su portentoso físico, y contrató en 2013 al exnúmero tres del mundo Ivan Ljubicic, más la ayuda de Ricardo Piatti, con el que ya venía trabajando. Y los resultados están a la vista de todos. Toronto, Cincinnati y US Open, la parte en la que mejor se desempeña del año, son el futuro próximo de este gigante sacador que ya no solo saca bien...
Daniel Vitale Pizarro